18 sept 2013

Tristessa dieciochera

A veces, en estas fechas dieciocheras, cuando miro la bandera patria, se me vienen a la cabeza esos recuerdos de niñez; cuando no era tan loca y suelta y mis noches las disfrutaba dibujando no chupando picos. Y entonces, una imagen queda grabada en mi mente: Yo dibujando a Whitney Houston mientras mi papá le gritaba a mi mamá y yo susurraba: ¡Mátala, mátala, mátala!...Así quizás tengo algo interesante que contarle a mis compañeritos el lunes y se interesan en mí y ya no se burlan de mi forma coliza de ser. Así quizás le doy lástima a alguien y me quieren al fin. Así quizás papá ya no golpea más a mamá, ni me grita más a mí ni a mi hermanito. Matar a mamá era la única solución, razonaba mi mente infantil.
 Ninguna bandera flameaba fuera de mi casa ese día.

No hay comentarios:

Publicar un comentario