Primera persona

Yo soy: luces de neón, sudor, sexo, semen, dolor, cigarrillos, éxtasis, decepción, pasión, atrofiado y maricón.

Tú eres:  lágrimas, cuchillas, cenicero, furia, santos, maquinarias y fantasmas, ilusión y confusión, histeria, degradación, mi perdición.

Nosotros somos: Narcisismo. Nosotros no somos nada pero lo somos todo, somos odio y pasión. Nosotros somos santos pecadores y pecadores santos. Nosotros somos pestañas falsas, silicona, lentejuelas, purpurina.

Nosotros somos: Maricones, de closet, de antro gay, de esquina sucia, de barrio rojo, de pene erecto, de cuchillo ensangrentado, de violación anal, de herpes, de sífilis, de sida, de muerte y resurrección, de putrefacción.

Yo soy algo que tú no entiendes y tú eres algo que yo no quiero comprender ni me interesa hacerlo.

No tenemos mucho tiempo más a nuestro favor, la vida se nos hace limitada y distante. Estamos fuera de tiempo. Tiempo lejano, tiempo perdido.

Tú estás después, tú estás en segundo plano, en narrador testigo porque yo soy mi mundo, mi placer, mi amor, mi Dios y aunque lo dudes esto está escrito en primera persona.